La dermatitis atópica es una afección de la piel que afecta a personas de todas las edades. Esta enfermedad inflamatoria provoca picazón intensa, enrojecimiento, sequedad y erupciones cutáneas en la piel, por lo que es muy molesta para quienes la padecen.
¿Qué es dermatitis atópica?
La dermatitis atópica, también conocida como eczema atópico, es una enfermedad crónica de la piel que se caracteriza por la inflamación y enrojecimiento de la piel, acompañados de picazón intensa. Es una afección común en niños y adultos y suele presentarse en brotes intermitentes.
Quienes padecen dermatitis atópica experimentan períodos de brotes agudos seguidos de períodos de alivio relativo, lo que puede afectar significativamente su calidad de vida.
Síntomas de la dermatitis atópica
Picazón intensa
Es el síntoma más característico y molesto. La picazón puede ser tan intensa que lleva a rascarse la piel, lo que empeora la inflamación y la irritación.
Erupciones cutáneas
Pueden variar en apariencia y gravedad, pero generalmente se presentan como parches rojos, escamosos y con costras en la piel.
Piel seca y sensible
Las personas con dermatitis atópica a menudo tienen la piel extremadamente seca, áspera y sensible.
Enrojecimiento e inflamación
La piel afectada puede estar enrojecida e inflamada, especialmente durante los brotes.
Ampollas y costras
En algunos casos, pueden formarse ampollas y costras debido al rascado excesivo y la irritación.
¿Qué causa la dermatitis atópica?
La causa exacta de la dermatitis atópica no se conoce completamente, pero se cree que es el resultado de una combinación de factores genéticos, ambientales e inmunológicos.
La enfermedad tiende a empeorar con ciertos desencadenantes como alérgenos, irritantes, clima seco, estrés y sudoración excesiva.
La piel se vuelve hipersensible a irritantes y alérgenos, desencadenando la inflamación y picazón. Esta afección puede afectar diferentes áreas del cuerpo, variando en severidad.
Tratamiento dermatitis atópica en adultos y niños
El objetivo del tratamiento dermatitis atópica en adultos y niños es prevenir los brotes, espaciar el máximo tiempo posible su aparición y tratarlos cuando aparezcan. El tratamiento va a depender de la edad, de los síntomas y del estado de salud del paciente. Y normalmente los síntomas mejoran con el cuidado adecuado de la piel y con cambios en el estilo de vida del paciente.
A nivel farmacológico se puede realizar un tratamiento dermatitis atópica en adultos y niños, siempre bajo prescripción médica, recurriremos a corticoides para bajar la inflamación y el picor, a antihistamínicos por ejemplo en el caso de los niños para inducir además al sueño y evitar que el niño se rasque por la noche y pueda descansar. Recurriremos a antibióticos en los casos en los que haya ocurrido una posible sobreinfección sobre el eczema a causa del rascado; y a medicamentos inmunosupresores. Pero a nivel no farmacológico, y aquí queremos incidir, desde nuestro consejo dermofarmacéutico, hay muchas cosas que hacer y conocer para ayudar a que el paciente atópico tenga una mejor calidad de vida.
Higiene corporal
La higiene corporal es el primer paso en el cuidado de una piel con dermatitis atópica. Este paso es fundamental y tendemos a olvidarlo, pues nos centramos en recurrir rápido a tratar el picor con cremas o lociones calmantes.
En cuanto a la higiene de este tipo de piel hay varias cosas que tenemos que saber:
- Es preferible el baño a la ducha: En la medida de lo posible baños cortos de 5-10 minutos y con agua templada. El baño alivia el prurito, hidrata y permite limpiar la exudación y las posibles costras, favoreciendo una mayor penetración de la medicación tópica, en caso de que la hubiera.
- Los productos para la higiene a utilizar deben ser del tipo syndet y sobregrasos: Desde la farmacia siempre recomendamos el uso de aceites de ducha para una piel en brote y los geles como mantenimiento de estas pieles.
- Se desaconseja el uso de manoplas o esponjas: Puesto que puede irritar aún más a este tipo de piel. Debemos secar la piel con suavidad, sin friccionar o frotar en exceso ya que podemos aumentar la irritación.
La emoliencia y la hidratación corporal
El uso de cremas emolientes constituye la principal línea de actuación en el tratamiento de la dermatitis atópica, siendo fundamental para restaurar la capa córnea.
Es importante distinguir entre un emoliente y un hidratante, ya que un producto hidratante no aporta a la piel del paciente atópico las necesidades que requiere.
Los emolientes forman una capa protectora en la superficie del estrato córneo reteniendo el agua, y aportan lípidos estructurales que restauran la estructura de la barrera, lo que impide la penetración de los alérgenos y las sustancias irritantes, restableciendo el equilibrio de la flora cutánea y el control del picor, ayudando así a espaciar los brotes.
Los productos para la piel atópica se recomienda que sean aplicados una o dos veces al día, después del baño y antes de salir al exterior.
En el caso de una piel atópica que curse en brote, disponemos de herramientas tópicas no farmacológicas para tratar el inicio de un brote atópico. Este tipo de cremas también funcionan muy bien en sinergia con tratamiento tópico farmacológico y se puede intercalar su uso con ellos.
Protección solar
A la hora de elegir protección solar para este tipo de piel es recomendable que éste lleve un contenido muy bajo de filtros químicos o ausentes, ya que la capacidad de este tipo de sustancias de penetrar con facilidad en la piel pueden irritar y ocasionar brotes. Buscar siempre fotoprotectores con filtros físicos o pantallas minerales y que además sean hipoalergénicos y no contengan perfume.
Como recomendación de cuidado solar y post solar para una piel con dermatitis atópica, recomendamos:
- Utilizar FPS muy altos, aconsejable FPS 50.
- Aplicar los fotoprotectores 20 minutos antes de la exposición solar y renovarlos cada 2 horas.
- Secarse bien la piel después de cada baño, para evitar el efecto lupa de las gotas de agua que pueden provocar quemaduras solares.
Ejemplo protección solar para piel atópica: Línea Leti At4 pack protección solar.
Dermatitis y alimentación
Además de lo comentado anteriormente, la alimentación juega un papel importante en la dermatitis atópica. Asimismo, es fundamental tener en cuenta que no todas las personas experimentan mejoras a través de cambios en la dieta.
La relación entre la alimentación y la dermatitis atópica puede variar de una persona a otra, y no existe un enfoque dietético único que funcione para todos los casos, pero estos son algunos de los aspectos clave que deben tenerse en cuenta:
- Posibles alergias alimentarias: Algunas personas con dermatitis atópica pueden tener alergias alimentarias que desencadenan o empeoran los síntomas. Los alimentos comúnmente asociados con alergias incluyen leche de vaca, huevo, soja, trigo, cacahuetes, frutos secos, pescado y mariscos.
- Dieta antiinflamatoria: Una dieta rica en alimentos antiinflamatorios, como frutas, verduras, pescado rico en ácidos grasos omega-3, nueces y semillas, puede ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo. Esto puede contribuir a controlar los síntomas de la dermatitis atópica.
- Hidratación y nutrición adecuada: Mantener una buena hidratación y una dieta equilibrada que incluya una variedad de nutrientes es esencial para mantener la salud de la piel en general. La piel bien hidratada y bien alimentada puede estar mejor preparada para manejar los síntomas de la dermatitis atópica.
Dermatitis atópica: alimentos prohibidos
Cuando se padece dermatitis atópica hay alimentos prohibidos que no deberían tomarse o, más bien, que se recomiendan reducir o eliminar de la dieta diaria porque pueden empeorar los síntomas de esta enfermedad cutánea.
Algunas personas con dermatitis atópica pueden experimentar empeoramiento de los síntomas al consumir alimentos picantes, alcohol, cafeína o alimentos procesados que contienen aditivos y conservantes. Por esto, identificar y evitar estos irritantes alimentarios puede ser muy beneficioso.
También en ciertos casos, eliminar de la dieta los alimentos que desencadenan alergias puede reducir los brotes de dermatitis atópica. Esto se debe hacer bajo la supervisión de un profesional de la salud, para asegurarse de que la dieta aún sea equilibrada y nutricionalmente adecuada.
Si tienes alguna duda adicional sobre dermatitis atópica no dudes en ponerte en contacto con nosotros. ¡Estaremos encantados de ayudarte!